Vera Masagâo Ribeiro (1999). Alfabetismo e atitudes.
Sao Paulo: Açâo Educativa.
255 páginas
Preço R$ 21,00 ISBN 85-308-0540-2
Reseñado por
Ana Inés Heras, Ph.D.
CONICET,
Argentina
21 de noviembre de 2001
Resumén
Este libro presenta una
investigación en torno al concepto de alfabetismo,
centrándose en una muestra de población joven y
adulta de San Pablo, Brasil. Masagâo Ribeiro enfoca su
presentación hacia la relación entre
lecto-escritura y actitudes, y de este modo propone centrarse en
el concepto de alfabetismo, es decir, de la
utilización de las habilidades de lecto-escritura en
relación con los contextos de vida de cada individuo o
grupo social, y de los hábitos, procedimientos y vivencias
que este uso genera. Por lo dicho, el estudio partió del
supuesto de que el dominio de habilidades de comprensión
de textos escritos no solamente se refiere a poder acceder a lo
que se lee, sino a los efectos de esas habilidades, en un sentido
amplio, en el desempeño de vida de las
personas.
Abstract
This book explores the
concept of literacy in the city of Sâo Paulo, Brazil. As
part of a larger study desgined and directed by a team of OREALC
(Organización Regional de Educación para
América Latina y el Caribe, UNESCO) researchers, the
author of this book centers her work on two themes: 1) what it
means to be literate in a city like Sâo Paulo, and what
kinds of literacies one may encounter in this environment; and 2)
what kinds of relationships are established between literate
practices and other social practices.
From this perspective,
the study presented in this book is useful to understand what are
the demands placed on the citizens living in a large Latin-American
city, in regards to their literacy abilities. Based on these
findings, the book opens challenging questions as to the ways in
which literacy is to be considered, not only during the schooling
process, but also after graduation, and for life.
Investigando el
“alfabestismo”
Este libro presenta una
investigación en torno al concepto de alfabetismo,
centrándose en una muestra de población joven y
adulta de San Pablo, Brasil. A pesar de ser un estudio
localizado, la investigación tiene origen en un proyecto
amplio, coordinado por la OREALC (Organización Regional de
Educación para América Latina y el Caribe, UNESCO)
que se realizó en siete países latinoamericanos:
Paraguay, Argentina, Chile, Brasil, Colombia, Venezuela y
México. Su objetivo fue el de identificar y analizar el
fenómeno del analfabetismo funcional en América
Latina en por lo menos un gran centro urbano de los países
mencionados.
La preocupación por investigar acerca del analfabetismo
funcional surge del interés por entender los alcances del
problema y sus consecuencias para la región, ya que,
según la definición básica del concepto
(propuesta por UNESCO en 1978), un analfabeto funcional no puede
participar eficazmente en su comunidad y tiene limitados su
desarrollo y el de su comunidad (Infante 1994b, citado por
Masagâo Ribeiro). Partiendo de esta idea general, y tomando
en cuenta que esta es una definición relativa (en tanto
participación eficaz y desarrollo se
definen en cada contexto y situación) surgió la
iniciativa de tomar a la región como unidad de
análisis, y especificar cuál es el sentido de este
concepto (analfabetismo funcional) en este contexto
específico. Se pensó un diseño a la vez
cuanti y cualitativo que pudiera dar cuenta del tipo de
habilidades de lectura en la población relevada, al tiempo
que pudiera establecer qué competencias se requieren para
funcionar en los centros urbanos donde se investigó este
tema. Si bien la autora comenta las relaciones entre el estudio
regional y el desarrollado en San Pablo, específicamente
en aspectos relacionados con la concepción teórica
de lo estudiado y con los métodos de análisis, era
de esperar que pudiera analizar e interpretar los resultados de
su trabajo en referencia a los de los otros países de la
región. Así, una posibilidad rica de
comparación intra-región, no se hace accesible al
lector, aunque probablemente se deba a desfasajes entre los
ritmos de investigación de los distintos países
envueltos en el proyecto. De todos modos, no se aclara el motivo
por el cual no hay referencia al corpus de datos de los siete
países de la región, que debe ser
riquísimo.
A partir de este marco
general que guió la investigación de OREALC, y como
parte del colectivo de investigación regional,
Masagâo Ribeiro enfoca su presentación hacia la
relación entre lecto-escritura y actitudes, y de este modo
propone centrarse en el concepto de alfabetismo, es decir,
de la utilización de las habilidades de lecto-escritura en
relación con los contextos de vida de cada individuo o
grupo social, y de los hábitos, procedimientos y vivencias
que este uso genera. Por lo dicho, el estudio partió del
supuesto de que el dominio de habilidades de comprensión
de textos escritos no solamente se refiere a poder acceder a lo
que se lee, sino a los efectos de esas habilidades, en un sentido
amplio, en el desempeño de vida de las personas. Es decir:
la capacidad de ser alfabeto y funcionar adecuadamente en los
contextos de vida en que cada uno se desempeña es
percibida como un valor y, a su vez, genera patrones de
comportamiento específicos, hábitos y actitudes en
grupos específicos de personas. Para la autora existe
además otra razón para considerar el alfabetismo en
relación a las actitudes, y es que en Brasil, así
como en otros países de la región, las reformas
curriculares han puesto énfasis en que debe pensarse a los
contenidos en sus dimensiones conceptual, procedimental y
actitudinal, y a las relaciones entre estas
dimensiones.
Al tomar el alfabetismo
como núcleo central la autora se ubica, en el primer
capítulo, en referencia a una comunidad de
investigación que propone que la lectoescritura y las
actitudes alfabetas son un fenómeno socialmente construido
e históricamente contextualizado. Con este
propósito presenta un relevamiento crítico de las
contribuciones de algunas disciplinas y autores, con lo cual, un
logro del primer capítulo es precisamente mostrar que el
fenómeno en discusión ha generado, en los
últimos cuarenta años, un debate
interdisciplinario: convergen en él estudios desde la
perspectiva antropológica, la perspectiva de estudios
literarios, la psicología, la historia, entre otras
ciencias. Al revisar las contribuciones de estas corrientes,
representadas por algunos de sus autores más
significativos, la autora logra exponer con calidad una
caracterización del fenómeno tomando en cuenta tres
aspectos relevantes: que el alfabetismo es complejo, que es
contextualizado (es decir, es un fenómeno cultural, social
y con dimensión histórica) y que no es lineal, en
el sentido que muchas veces se le atribuye a la lectoescritura
una asociación estrecha y simplista entre
“alfabetismo” y “modernización. Esta
caracterización nos alerta a preguntarnos acerca de los
modos concretos en que cada sociedad, y cada grupo dentro de las
sociedades, se relaciona con las capacidades de leer y escribir,
tomando así el aspecto actitudinal como un componente
diferenciado, que, a su vez, genera un efecto diferencial:
aún en una sociedad que se considere, en su conjunto,
alfabeta, las diferentes actitudes de sus participantes marcan
pertenencias distintas con respecto a las comunidades de
lectoescritura a las que puedan pertenecer.
Aunque las tres
características mencionadas (complejidad,
contextualización y no linearidad) son fundamentales para
la autora, y se evidencia un esfuerzo para usarlos como un marco
interpretativo en su trabajo, quizás la
presentación en este libro podría enriquecerse si
se extendiera sobre las distinciones entre culturas o comunidades
de lectoescritores que releva, en dos sentidos:
- por un lado, en tanto y en cuanto
se hace evidente a partir de la encuesta y de la
aplicación de una fase cualitativa que existen diversas
comunidades de lectoescritura dentro de la sociedad paulista, y
que en ellas se generan actitudes, valores e ideas acerca de la
función de la lectoescritura, el lector podría
esperar una descripción (o al menos el planteo de
interrogantes para guiar una posible descripción) de estas
culturas o comunidades diversas;
- por otro, podrían haberse
relevado con más profundidad algunos hallazgos a los que
solamente se hace mención en forma escueta, pero que
parecen muy importantes, como por ejemplo, la relación
entre las actitudes hacia la lectoescritura y el aprovechamiento
de oportunidades de formación continua o de otras ofertas
culturales, o la relación entre la lectoescritura y la
expresión de la subjetividad en quienes presentan un grado
bajo de alfabetismo. Es posible que esta limitación se
deba a que, para profundizar en estos aspectos, hubiera sido
necesario diseñar un componente de corte
etnográfico y sociolingüístico. Quizás
puede proponerse esta línea como un estudio interesante
para continuar el presentado en este libro, puesto que se
estaría ante la posibilidad de relevar,
empíricamente, los modos en que el alfabetismo es una
expresión multicultural, y en que las distintas
comunidades de alfabetismo desarrollan modos específicos,
distintivos y diversos (desde el punto de vista de los
significados que generan) de relacionarse con la palabra,
precisamente porque este estudio se preocupó por mostrar
las relaciones con la lectoescritura de gente diversa que convive
en un mismo (gran) centro urbano: San Pablo.
El método de
relevamiento y análisis tuvo varias etapas. Se
comenzó con un relevamiento cuantitativo donde se tomaron
tests de lectura y se colectaron datos sobre el perfil
demográfico y educacional de los entrevistados;
también se preguntó acerca del uso de la lectura,
la escritura y la matemática en el contexto del trabajo y
la vida diaria. La muestra fue de 1000 casos (random sampling)
de individuos entre 15 y 54 años de edad, residentes en el
municipio de San Pablo. Se siguieron criterios de
comparación de la muestra con otras bases de datos
municipales y con las bases de datos de los otros países
para asegurar que fuera representativa y pasible de ser comparada
entre países. Además, los instrumentos y
métodos de esta parte del estudio fueron establecidos en
acuerdo con los otros países de la región que
participaron del proyecto, a fin de garantizar también en
este aspecto posibilidades de comparación. Los resultados
de la primera parte del relevamiento cuantitativo arrojaron que
un tercio de la muestra se desempeñó con un nivel
tal que no pudo pasar a la segunda etapa del test. Este tercio
estuvo compuesto por un porcentaje (7,4%) cuyo conocimiento de la
lengua escrita es muy limitado, y por otro porcentaje (25,5%) que
—aún cuando demostraron tener un cierto dominio de
la lectoescritura frente a los textos presentados— no
pudieron desempeñar las tareas asociadas a
identificación, tratamiento e interpretación de
información. Este grupo desempeña su trabajo en
ambientes donde no hay oportunidades de procesar
información escrita y numérica; además,
presentan un grado bajo de escolarización (en general,
escuela primaria incompleta). Tampoco usa la lectoescritura fuera
del trabajo más que para registros simples de tareas o
procesos. Estos son quienes se clasificaron en un nivel bajo y
medio-bajo para la etapa cualitativa del estudio.
En las personas
clasificadas en los niveles medio-alto y alto de alfabetismo se
identificaron una variedad de prácticas, hábitos y
actitudes. Son personas cuyo perfil profesional se relaciona con
trabajos en oficinas, bancos, servicios públicos, empleos
técnicos, profesionales liberales, y de niveles
socioeconómicos más altos. Estas personas usan
más intensamente sus habilidades de lectoescritura de
forma cotidiana en distintos contextos, tales como el
doméstico-urbano, comercial-burocrático, trabajo,
participación y formación continua (contextos de
clasificación que se usaron en la etapa cualitativa del
estudio).
Este nivel de
relevamiento permitió ya establecer cierto abanico de
actitudes en tanto que se evidenciaron los intereses de los
sujetos entrevistados en relación a la lectoescritura
(ejemplo, si leer libros, escribir cartas o leer el diario forman
parte de sus prácticas y preferencias cotidianas). Como
las dimensiones sobre las que se implementaron los tests fueron
de distinto tipo (comprensión de textos en prosa, de
textos esquemáticos y de textos con información
numérica), los resultados del análisis permitieron
mostrar niveles en estas dimensiones, lo cual presenta más
complejidad que otro tipo de relevamiento, donde solamente el
test indica la relación con textos en prosa y de tipo
escolarizado. Para cada dominio de los tres indicados se
establecieron cuatro niveles de habilidad y se ubicó a los
sujetos en esos niveles, según su
desempeño.
A partir de este
relevamiento se identificó una sub-muestra con la cual se
desarrolló la etapa cualitativa del estudio (24 sujetos
seleccionados intencionalmente de los mil de la muestra inicial).
Un aspecto interesante de la selección de la submuestra es
el hecho de que permitió estudiar más de cerca
algunos grupos particulares, como por ejemplo, sujetos que no
alcanzaron un puntaje mínimo en el test inicial, o sujetos
que alcanzaron un buen puntaje y que tienen bajo nivel de
escolaridad. Este último grupo fue interesante para
identificar qué otros contextos (que no son la escuela)
permiten vías de acceso a la lectoescritura en una ciudad
como San Pablo.
En la etapa cualitativa
de la investigación se profundizó la
identificación de detalles acerca de los sujetos (historia
educacional y social), además de relevar datos sobre sus
prácticas, hábitos e intereses. Es en esta etapa
que se empieza a vislumbrar la interacción de aspectos
específicos en cada “historia particular de
alfabetismo” (p.125): los usos de la lectura, escritura y
cálculo en el contexto del trabajo y fuera de él;
las tendencias en relación a las actitudes con respecto a
leer y escribir; las orientaciones actitudinales más
amplias que influyen en la lectoescritura (ejemplo, las relativas
a las relaciones con los medios de comunicación o con el
manejo de la comunicación oral).
En esta etapa del
trabajo se distinguieron cinco contextos para orientar la
recolección y análisis de datos:
doméstico-urbano, comercial-burocrático, trabajo,
participación y formación continua. En las
entrevistas se preguntó acerca de las estrategias que usan
en cada uno de ellos.
Por último, la
etapa cualitativa incluyó un momento de tareas simuladas
para estudiar las actitudes de los sujetos frente al texto
escrito. En este momento fue también posible observar que,
en los casos en que se presentaban desafíos u
obstáculos, los entrevistados echaban mano de estrategias
alternativas para reorientar su acción y relación
con la tarea de lectoescritura, como por ejemplo, comprender un
error de interpretación a través del diálogo
con la entrevistadora pero no reconocerlo explícitamente
sino usar directamente la información corregida para
seguir interactuando y resolviendo la tarea. Estos hallazgos son
importantes, en tanto muestran que aprender a leer y escribir, y
aprender a usar esas habilidades para un desarrollo continuo, son
fenómenos inter-accionales: con un texto, con un
interlocutor, con un contexto de significados, etc. En este
sentido, si bien el libro es rico en ejemplos de testimonios y
transcripciones de diálogos, podría haberse pensado
en la presentación de los datos de modo tal que se
dé verdadera cuenta de este peso interaccional (la autora
lo llama “de negociación”) en el uso y
desarrollo de las habilidades y actitudes de lectoescritura. Los
aportes del análisis conversacional, del análisis
del discurso o de la sociolingüística de la
interacción podrían beneficiar el análisis y
la presentación de esta parte de los datos que analiza la
autora.
En todo, los resultados
del análisis muestran que, tomando como base la
población joven y adulta de San Pablo, la
preocupación por el alfabetismo debe trascender una mirada
simple ya que, para funcionar en los contextos urbanos como el
estudiado, hacen falta habilidades más complejas.
Así, si hubiera que pensar en cómo intervenir
adecuadamente, sería preciso tomar en cuenta los hallazgos
de este estudio, en el sentido de que dentro de una misma
comunidad urbana, que es, ciertamente, una comunidad alfabeta, se
encuentran matices muy variados.
Por tanto, una
intervención unívoca sería ciertamente
desacertada, ya que las complejidades de este fenómeno
social llaman a diseñar una intervención que
contemple distintos momentos en relación a la
adquisición y desarrollo de la lectoescritura y de las
actitudes alfabetas: los momentos de adquisición escolar
de la lectoescritura; su mantención posterior; el
desarrollo en contextos sociales variados tales como el trabajo,
la familia, la escuela y programas educativos, las organizaciones
colectivas, entre otros. Un aporte conceptual interesante de la
autora consiste precisamente en señalar que no basta
pensar que un grado mínimo de escolaridad asegura la
capacidad de usar con facilidad la lectoescritura, y de continuar
desarrollándose en ella a lo largo de la vida, ya que las
actitudes en relación a la adquisición y desarrollo
del alfabetismo se evidencian en contextos variados y pueden
continuar de por vida. Por ello, si se toma en cuenta este
análisis, un aspecto clave es cómo relacionar los
aprendizajes escolares con los de fuera de la escuela, tanto
cuando el sujeto está en proceso de
escolarización, como una vez que la termina, formalmente.
Se torna aún más importante una reflexión
acerca de qué tipo de alfabetización debería
proporcionar la escuela y qué tipo de actitudes asociadas
a ella: la capacidad de leer, escribir y comprender
información escrita (en prosa, en esquemas o en
gráficos numéricos) debería cimentarse con
la capacidad de generar hábitos y actitudes reflexivos
acerca de estos aprendizajes. De este modo, un sujeto
escolarizado, dentro de esta perspectiva, sería quien no
solamente puede usar las hablidades para acceder a un texto, sino
aquel quien puede continuar desarrollando sus habilidades,
capacidades y conocimientos sobrelos tipos textos que lee,
y sobre los tipos de desafíos presentados por las
situaciones de lectoescritura. En este sentido, este libro hace
luz sobre la relación entre mecanismos procedimentales,
conceptuales y actitudinales con respecto a la
alfabetización: tan importante como conocer y poder usar
los mecanismos de procedimiento, y poder intepretar los conceptos
que se comunican a través de la lectoescritura, es tener
una disposición hacia el desarrollo continuo de esos
procedimientos y conceptos. Este es el campo de las actitudes,
que la autora propone debería tenerse especialmente en
cuenta en la escuela, ya que, de la etapa cualitativa del
estudio, surge que (en tanto las actitudes son vivencias), se
debería proponer que la escuela diseñe momentos
específicos de vivencia positiva de las habilidades de
leer y escribir.
En suma, este es un
libro que vale la pena leer porque está bien documentado,
bien escrito, es interesante y nos deja pensando acerca de
cuestiones importantes.
Referencias
Infante, I. (1994b). O
analfabetismo funcional na América Latina: Algumas
características a partir de uma pesquisa regional. En
Encontro latino-americano sobre educaçao de jovens e
adultos trabalhadores. Brasília: Inep.
Acerca de la autora de
la reseña
Ana Inés
Heras, Ph.D.
Es investigadora del
Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y
Técnicas de la Argentina. Se especializa en las
relaciones entre lenguaje, cultura y escuela, tema que
actualmente estudia en la Provincia de Jujuy,
Argentina.
Reseñas Educativas/ Resenhas Educativas publica reseñas
de libros sobre educación de publicación reciente, cubriendo
tanto trabajos académicos como practicas educativas.
Todas las informaciones son evaluadas por los editores:
Editor para Español y Portugués
Gustavo E. Fischman
Arizona State University
Editor General (inglés)
Gene V Glass
Arizona State University
Reseñas Educativas es firmante de la Budapest Open Access Initiative.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario